Las propiedades de un buen aceite están en función de la limpieza, cuidados y trazabilidad del producto. Si a esto unimos la composición de los terrenos, la situación idónea de las fincas (a 470 y 730 metros de altitud). Conseguimos unos frutos de amplios aromas y colores que propician la máxima calidad y nos permiten obtener unos análisis espectaculares.
Este aceite presenta tanto en boca como en nariz un frutado de oliva de una intensidad media alta con notas verdes de hierba cortada y de hoja de olivo.
En boca es muy armoniosos, los atributos amargo, picante y dulce están perfectamente equilibrados, presenta aromas secundarios que recuerdan la tomatera, la almendra y la alcachofa.